Page 20 - Revista No.2 2019
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Pedagogía «creativa» desde la condición humana

                     organizar las relaciones entre el conocimien-  invita a coger «herramientas y conceptos»
                     to y las personas que o aprenden y/o cons-     que pueden enriquecerla. Lo único es que no
                     truyen en el aula?                             debe de olvidar lo principal… ¿Será que cuida-
                                                                    mos de nuestro «principal» cuando fomen-
                     Estas preguntas recuerdan una historia an-     tamos solamente la cultura del éxito? Para
                     tigua:                                         ser excelente hay que ser exitoso… ¿Y quién
                                                                    define los parámetros de este «éxito» y de
                        Cuenta esa historia, que una pobre mujer con   esta «excelencia»? ¿Serán estos parámetros
                        su bebé, pasó frente a la entrada de una ca-  «excluyentes» o más bien pueden generar
                        verna y escuchó una voz misteriosa que decía:   desarrollo, inclusión social, etc.?
                        «Puedes entrar y coger todo lo que quieras,
                        pero ¡no te olvides de lo principal!». La mujer   Estos parámetros permiten educar humanos
                        curiosa se acercó un poco más y escuchó otra   que sigan después de nosotros conduciendo
                        vez la misma frase y algo más: «Después de   este planeta a buen puerto? ¿Hay peligro de
                        que salgas de la caverna la puerta se cerrará   que sean parámetros que formen gente ex-
                        para siempre, así que no te olvides de lo prin-  cesivamente competitiva, que pueda llegar a
                        cipal». La mujer entró en la caverna y encon-  niveles de arrogancia que le haga olvidarse
                        tró muchas riquezas y pensó que jamás volve-  de lo principal, en nombre de una excelencia
                        ría a ser pobre y pasar hambre. Fascinada con   «foránea»? ¿Entre estos parámetros hay al-
                        tanto oro y joyas, puso a su bebé bien ubicado   guno que nos diga al oído: sic transit gloria
                                                                           1
                        en un rincón y empezó a recoger todo el oro y   mundi  (la gloria del mundo es transitoria)?
                        joyas que podía. La voz misteriosa volvió a de-
                        cir: «¡Date prisa! ¡Date prisa! ¡La puerta de la
                        caverna ya se cierra! ¡Date prisa!». La mujer,   La condición humana como punto
                        con mucha prisa, salió corriendo de la caverna   de partida de la educación
                        con los brazos llenos de oro y joyas y escuchó
                        sus espaldas el fuerte sonido del cierre de las   ¿Qué es la condición humana? La condi-
                        puertas. Pero se dio cuenta de que su bebé   ción humana es aquello que nos caracteriza
                        se había quedado adentro. ¡Y para siempre!   como humanos y nos diferencia de las de-
                        El tiempo pasó, la riqueza recogida en la ca-  más formas de vida del planeta; es algo que
                        verna se acabó pronto, pero su desesperación   nos define independientemente de la cultura
                        de madre duró mucho… Su conciencia le hacía   en la cual nacimos, del género, de la edad, de
                        preguntarse una y otra vez: «¿Por qué me ol-  la clase social, etc. O sea, son unos mínimos
                        vidé de lo principal?».                     que nos unen y nos identifican como huma-
                                                                    nos. ¿Por qué entender la condición huma-
                     Podemos hacer una analogía entre la re-        na como punto de partida de la educación?
                     flexión anterior y este cuento. La educación   porque hay que considerar nuestras raíces
                     es la encargada, como la madre del cuento,     humanas para avanzar a partir de ellas. Por-
                     de las nuevas generaciones. Se trata de su     que si partimos de aquello que nos carac-
                     tarea principal y para realizarla necesita en-  teriza como los seres que somos, podemos
                     tender a fondo la condición humana y cómo      avanzar y crecer desde aquello que respeta a
                     ayudar a que ésta mejore y llegue a ser ex-    quienes somos como seres en este planeta.
                     celente (¡si es el caso!).
                                                                    Hay varias maneras de partir de la condición
                     En  los últimos años,  la  educación  está  pa-  humana. Y un ejemplo puede ser Paulo Freire
                     sando delante de la caverna de la «excelen-    1  Frase que algunos esclavos susurraban al oído de los em-
                     cia, de la calidad total», escucha su voz que   peradores durante los triunfos romanos.
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                     Saber Para Todos                          Número 2                      Secretaría de Educación
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